martes, 31 de enero de 2012

Still isn't over


Es raro, hace menos de una semana escribí: “No puedo ni siquiera articular palabra, y es que no entiendo; ni asimilo que se haya acabado.” Tenía ese sabor amargo de cuando sabes que algo no termino de la forma correcta, o que no debía si quiera terminar… Resulto no ser así, y me alegro de haber estado equivocada.

La verdad es que tengo dos meses siendo suya, absolutamente suya. Dos meses sin dormir y dos meses soñando con nosotros. Poco tiempo, pero cada vez que trataba de alejarme era como si una fuerza magnética o sencillamente nosotros siendo un poco tercos, nos traía de vuelta hasta donde estaba el otro.

No le puedo poner fecha, ni decir cuando ni como comenzó todo, si fue cuando ese amigo con el cual no tenía mucho contacto me dijo “ve ésta serie” (si fue por eso deberé agradecer a HBO de por vida), o ese día que caminamos juntos, capaz tuvo que ver con aquel momento cuando comenzamos a mandarnos imágenes tontas y cómicas toda la noche, 0 con esas conversaciones sobre volcanes y cosas que nunca debiste haber hecho, o tiempo después fue ese: “Word can get lots of things” muy de él que me dejo atontada. Ese mensaje en francés de madrugada, o esa conversación que duro mil horas por teléfono, o tal vez fue cuando me dijo que había leído uno de mis libros favoritos, y me mando “La donna e mobile” de Pavarotti.

Decir que fue acá o allá, con The Cure y Adele en el medio, cuando fue que empecé a enamorarme de él es imposible. Ahorita solo digo gracias porque la gravedad existe (si fue eso lo que nos puso juntos) y porque la química entre dos personas también. Y si bien no puedo declarar que todo va a salir perfecto, me siento feliz de poder intentarlo... 


If you're a bird, I'm a bird




0 comentarios:

Publicar un comentario